El núcleo de acogida de la Ballard Food Bank

Autor: Kara Wistoe, escritora voluntaria

Todos los miércoles, de 10 a 16 horas, los clientes son recibidos por la cara sonriente de Kristen Wittstock. Como voluntaria de recepción, desempeña un papel fundamental en el buen funcionamiento del banco de alimentos. Todos los días llegan nuevas familias, y Kristen y los demás voluntarios de recepción son a menudo su primer contacto. "Somos la cara de la organización", dice Kristen, que es voluntaria en la recepción desde hace cinco años.

Kristen responde a las preguntas y explica las normas en esta concurrida zona a la entrada del banco de alimentos. Dirige a los clientes hacia el mercado y el Kindness Café, donde pueden obtener una comida caliente de lunes a jueves, y bolsas de comida sin cocinar para quienes no tienen acceso a una cocina. Registra a los nuevos clientes en los servicios de alimentación y cuenta el número de personas que acuden. Estas estadísticas se utilizan para determinar la cantidad y el tipo de comida que hay que pedir, incluida la cantidad de comidas sin gluten, bajas en sodio, vegetarianas y otras especiales para clientes con restricciones dietéticas.

El personal de recepción también proporciona información sobre los recursos vitales disponibles a través de Ballard Food Bank. "La mayoría de las personas nuevas no se dan cuenta de todo lo que ofrecemos, como servicios de correo, la renta y asistencia para servicios públicos, vales de identificación, billetes de autobús y otros recursos no relacionados con la alimentación. También tenemos agencias asociadas que ayudan a los clientes en nuestro Centro de Recursos con atención veterinaria gratuita, vacunas, exámenes de salud y servicios de vivienda y salud mental", dice la gerente del Banco de Alimentos, Sarah Huttula. "Nuestros voluntarios les dan la bienvenida con sonrisas amistosas y conversación para que todos se sientan bienvenidos, relajados y cómodos".

Kristen Wittstock en nuestro mercado comunitario gratuito, frente a las estanterías repletas.

Kristen Wittstock en nuestro mercado comunitario gratuito.

Más allá de proporcionar una descripción del protocolo y los servicios del banco de alimentos, la recepción puede proporcionar el primer paso hacia la conexión personal. "El número de lágrimas de gratitud derramadas tras recibir ayuda o apoyo siempre me toca la fibra sensible", dice Sarah. "Hace poco estuve hablando con un cliente de hace tiempo en la recepción. Mencionó que había surgido la oportunidad de mudarse a otro estado. Lo pensó y se dio cuenta de que no podía dejar el banco de alimentos. Significa mucho para él y ha recibido mucho apoyo aquí durante las últimas décadas. Dijo que no podía imaginar su vida sin venir aquí. Esto demuestra realmente el carácter comunitario de este lugar para la gente".  

Si está interesado en ser voluntario, rellene una solicitud en línea. Los voluntarios de recepción se comprometen a cumplir un horario fijo cada semana o algunas veces al mes. Kristen comparte su consejo para los nuevos voluntarios en esta importante función. "Se necesita mucha compasión para trabajar en la recepción. Tienes que entender que mucha gente no tiene acceso a la comida. Hay que hacer varias cosas a la vez, manejar bien el estrés y mantener el sentido del humor. Debes disfrutar interactuando con todo tipo de personas. La recepción es el lugar donde la mayoría de la gente tiene su primera conexión con el banco de alimentos y yo disfruto compartiendo todo lo que tenemos que ofrecer."

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